Doble Dividendo

La inversión mundial en combustibles fósiles en camino a superar en 300% la inversion en energías renovables

Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), una organización de investigación inter-gubernamental con sede en París, la inversión mundial acumulada de nueva extracción y procesamiento de combustibles fósiles estará en los 22 trillones de dólares entre 2012 y 2035, mientras que la inversión en energías renovables, la energía hidroeléctrica, y la energía nuclear será de sólo $ 7.3 trillones (un trillon es un 1 seguido por 12 ceros). En este período, solo la inversión en petróleo será de 10 trillones de dólares y se espera que exceda el gasto combinado en energía eólica, solar, geotérmica, biocombustibles, energía hidroeléctrica, nuclear y cualquier otra forma de energía renovable.

Además, según la AIE, una parte cada vez mayor de la inversión en combustibles fósiles se dedicará a las formas no convencionales de petróleo y gas: las arenas bituminosas de Canadá, crudo extra-pesado de Venezuela, el petróleo y el gas de shale y el Ártico y depósitos de petróleo de profundidad en alta mar.

La explicación de esto es bastante simple: las grandes compañias de petroleo y energia no estan invirtiendo en energias renovables y el suministro mundial de petróleo convencional y gas está desapareciendo rápidamente. Con la demanda mundial de combustibles fósiles aumentando un 26% de aquí a 2035, cada vez más y más esta demanda tendrá que ser proporcionada por combustibles no convencionales.

En un mundo así, una cosa es segura: las emisiones mundiales de carbono se elevarán más allá de nuestros supuestos más desfavorables actuales, es decir, las olas de calor intensas serán cosa común y nuestras pocas zonas vírgenes que quedan serán diezmadas. Nuestros hijos y nietos probablemente hereden un planeta que tendrá poca semejanza al que recibimos nosotros. 

Las posibilidades de un acuerdo global de emisiones de CO2 aumentan (levemente) por los avances en China y EEUU

China y los EE.UU han logrado avances importantes en reducir sus emisiones de CO2 el año pasado y esto ha aumentado las posibilidades de lograr un acuerdo climático global, dijo la Agencia Internacional de Energía (AIE).

Lo que no es poco en estos tiempos. China y los EE.UU. son los dos emisores de CO2 más grandes del mundo y sus emisiones combinadas representan cerca del 45% del total mundial.

La AIE dice que las emisiones de China por quema de combustibles fósiles como el carbón y el gas crecieron a una de las tasas más bajas en la última década reflejando el mayor uso de energías renovable y mejoras significativas de eficiencia energética. Por otra parte, las emisiones de CO2 de los Estados Unidos cayeron a niveles no vistos desde mediados de la década del 90 y reflejaron un mayor uso de renovables y una substitución de carbón por gas.

Si este progreso continúa, debería hacer más fácil que las dos economías más grandes del mundo pudieran impulsar un acuerdo global para reducir las emisiones de CO2 dijo Fatih Birol, economista jefe de la Agencia Internacional de Energía.

Sin embargo, el reto continúa siendo mayúsculo. Aunque el aumento global de emisiones fue menor que en otros años, las emisiones mundiales del sector energético subieron un 1,4% en 2012 respecto al año anterior logrando un nuevo record de más de 31,6 gigatoneladas.

El principal problema continúa siendo los costos económicas de corto plazo. Si finalmente se logra un acuerdo sobre emisiones globales, las plantas de energía a carbón corren el riesgo de perder 1,800 millones de dólares en ingresos netos en las próximas dos décadas, mientras que el 8% de las nuevas plantas se enfrentan a un retiro anticipado y antes de que se recuperen la inversiones realizadas.

De todas maneras, es un precio menor, muy menor, a pagar comparado con el impacto que las sociedades deberán enfrentar en los peores escenarios de cambio climático. 

Datos nuevos confirman que hasta en Brasil la deforestación aumentó en los últimos 12 meses

Datos difundidos por el gobierno brasileño el viernes pasado indican que contrariamente a lo reflejado en la entrada anterior, la cual se basaba en datos de años pasados, la deforestación en el Amazonas brasilero también ha aumentado a pesar de las políticas activas del gobierno para evitar la destrucción de la mayor selva tropical del mundo.

En efecto, los datos satelitales recopilados por la Agencia Espacial de Brasil indicaron una pérdida de 465 kilómetros cuadrados de bosque durante el mes de mayo, un aumento de casi cinco veces en comparación con la destrucción detectada en mayo del 2012.

Desde el mes de agosto del año pasado, cuando comienza el periodo de  medición anual de Brasil, se deforestaron un total de 2,338 kilómetros cuadrados, lo que equivale a un aumento del 35% en comparación al año anterior. El área deforestad es aproximadamente tres veces el tamaño de la ciudad de Nueva York y ligeramente mayor que el total de 2.051 kilómetros cuadrados detectados por el mismo sistema para los 12 meses de medición que terminaron en julio de 2012. Es importante considerar que se necesitará un análisis más completo sobre el terreno para confirmar la extensión y el tipo de deforestación, por ejemplo la contribución de incendios forestales y otro tipo de degradación natural.

Aunque el aumento en la deforestación no es buena noticia, se debe tener en cuenta que el área deforestada es relativamente pequeña en comparación con los peores momentos de la deforestación del Amazonas, cuando madereros, agricultores y otros impulsaron la rápida destrucción del amazonas.

Sin embargo, estos nuevos datos alimentan los temores de científicos y ambientalistas sobre que los avances duramente ganados contra la deforestación en Brasil están experimentando un retroceso. Proyectos de infraestructura del gobierno, los cambios en la política ambiental y un aumento de los precios de la soja y otras exportaciones agrícolas brasileñas empujan la perdida de bosque.

(Deforestación en el amazonas brasilero. Las barras en rojo son datos del nuevo período y azules del período anterior. Fuente: Mongabay en base a datos de INPE) 

Excepto en Brasil, la tasa de deforestacion de selva amazónica aumentó en todos los otros países

Según un nuevo análisis basado en imágenes de satélite, la deforestación ha aumentado considerablemente en países con selva amazónica excepto en Brasil.

Investigadores de Terra-i y el equipo InfoAmazonia de O-Eco han desarrollado mapas actualizados de cobertura forestal de Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Guyana Francesa, Perú, Surinam y Venezuela. Los resultados revelan un incremento del 24% en la pérdida de bosques entre 2011 y 2012 y una tendencia creciente desde 2004.

Perú registró el mayor grado de pérdida de bosques en 2012 con 48.000 hectáreas, o un aumento de 47% en 2011. Lo siguieron Venezuela (11.606 ha), Colombia (10.069 ha), Bolivia (6975 ha), Suriname (6569 ha), Guyana (3713 ha), Ecuador (1663 ha) y Guyana Francesa (1.338 ha). En términos de variación porcentual, Colombia (con 118%) y Suriname (114%) tuvieron la tasa de crecimiento más grande de deforestación en el período. En contraste, Bolivia tuvo una caída del 66% en la deforestación.

Estos resultados incentivan el debate sobre “fugas”, o en otras palabras, si las reducciones de deforestación en Brasil, las cuales han sido notables en los últimos años, simplemente se han trasladado a otros países de la región. Los datos de este estudio parecen indicar que el efecto de “fuga” puede ser real y reavivan la discusion sobre el rol de inversores brasileños en países de la región, por ejemplo Paraguay, que ha extendido su área bajo soja y ganadería a costa de bosque virgen.

Finalmente, las zonas indígenas, que abarcan 4,4% de la superficie tuvieron el 1,5% de la pérdida de bosques entre 2004 y 2012. En comparación, las áreas protegidas que cubren el 19,9% de la zona tuvieron el 9,3% de la deforestación. Los resultados indican que las áreas indígenas, ajustadas en relación a tamaño, tuvieron una menor tasa de pérdida de bosques que los parques de la región.

Por primera vez en la historia, la especie humana produce mas pescado de granja que carne por ganadería

Por primera vez en la historia moderna, la especie humana ha producido más pescado artificial de granja que carne por ganadería. Los efectos ambientales de esta transición son complejos y no siempre beneficiosos.

En efecto, un informe del Earth Policy Institute en Washington DC reporta que la producción de peces de cultivo está aumentando rápidamente, alcanzando un récord de 66 millones de toneladas en 2012. La producción de carne, por el contrario, se ha estabilizado en 63 millones de toneladas producidas en el mismo periodo.

Si las tendencias actuales continúan, la especie humana, para el 2015, y por primera vez en la historia, consumirá más pescado artificial proveniente de granjas que pescado proveniente de pesquerías naturales, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico.

Cual es el impacto de esta tendencia sobre el medio ambiente? La respuesta depende del pescado criado en granja. Algunos peces de cultivo son buenas para el medio ambiente. Las granjas de cultivo de pescado en China, por ejemplo, las cuales producen el 62% de los peces de cultivo del mundo, se concentran en gran medida en especies como la carpa plateada. Este tipo de pez puede ser cultivado en los campos de arroz y se alimenta de hierba, plancton y detritus. Esta forma relativamente sostenible de la piscicultura aumenta la producción de arroz y produce poca contaminación.

Sin embargo, otras especies de cultivo como el salmón son carnívoras. Estos deben ser alimentados con peces más pequeños como las anchoas, los cuales son capturados en el medio silvestre. Como resultado, el cultivo de peces carnívoros tiene un impacto serio sobre el ambiente al contribuir al agotamiento de las pesquerías naturales.

(Producción de pescado y carne; 1950-2012. Fuente; EPI, basado cifras de FAO y USDA)